Los políticos profesionales y los periodistas son dos colectivos que se pasan el día hablando de crisis. Para no defraudar las expectativas, Francesco Frangiali, Secretario General de la OMT, habló de ello en su intervención inaugural de la Conferencia “El conocimiento como valor diferencial de los destinos turísticos”, que tiene lugar estos días en Málaga, co-organizada con la Junta de Andalucía. Para tranquilidad de los pesimistas vino a decir que no habrá un “tsunami turístico”, que el turismo resiste (alrededor de 900 millones de turistas internacionales el año pasado, con un crecimiento del 6,6% y en 2008 de un 3,8% hasta Agosto), que los países emergentes soportan mejor la crisis y son quienes con mayor fuerza están incorporando turistas a las estadísticas, y que las familias intentarán mantener las vacaciones por más que haya recortes en el tiempo o en el gasto. Digamos que la versión oficial del establishment se parece a la relativización del impacto y enfatizar la capacidad de resistencia. Es lo que alguien llamaría “la visión 2020”. Más allá de la verdad ilustrada, este argumentario aporta poco conocimiento a una situación de crisis, así que les añadiré algunos comentarios que encontré más creativos e innovadores, como entiendo corresponde a una situación como la actual. Nada mejor que una anécdota para describir la velocidad de los acontecimientos. La contaba esta misma tarde en la conferencia, el danés Peter Billing, responsable de las estadísticas regionales turísticas en Dinamarca. El buen hombre se había despertado a las cuatro de la madrugada con un mensaje de móvil aterrador: Sterling Airline estaba en bancarrota. No es que fuera un importante accionista de la compañía, sino de uno de los miles de clientes que se quedaban automáticamente sin vuelo de regreso a su casa. Repuesto del susto, dio una justificación más a quienes se empeñan en seguir hablando de crisis. Pero íbamos a las ideas. He aquí algunas:
En otra parte está Nueva Zelanda, pensé según escuchaba la presentación de Bruce Bassett, del Ministerio de Turismo. Su segmentación de los mercados, su interés en dar cabida a la participación de los turistas, la investigación técnica ofrecida a los profesionales y usuarios, así como la metodología y presentación misma, les colocan en otro punto del dial turístico.
Varias intervenciones de Robert Lanquar aspiraron a dirigir la atención sobre una visión crítica capaz de superar pasados enfoques neoliberales de crecimiento. Su interés por abordar nuevas vías medioambientales o sociales queda de manifiesto en este artículo sobre “Turismo, Migraciones y Codesarrollo”.
Varios asistentes entre el público apostaron por nuevas vías integradoras de los nuevos retos (cambio climático, crisis económica, etc.), sobre los viejos escenarios. En ese sentido con una demanda tan cambiante, segmentada y dinámica, resulta ciertamente pertinente preguntarse si resulta interesante la actual estadística turística (tanto de flujos como de impactos económicos), como si responde a las necesidades, como en el fondo, qué queremos saber. Expertos de la experiencia de Calvin Jones, acabaron por mostrar también su propio escepticismo crítico, sobre los sistemas de contabilidad ensayados y su utilidad futura.